La palabra “influencer” ha sido una de las más empleadas en el mundo del marketing en los últimos años. ¿Quién decide qué compramos o en qué marcas debemos confiar? En un primer momento, las marcas comenzaron a utilizar la figura de los influencers para sus estrategias de comunicación. Sin embargo, la burbuja de estos grandes personajes digitales está a punto de estallar. Ahora muchas empresas optan por nuevos perfiles. Así, empezamos a hablar de microinfluencers e incluso nanoinfluencers, que poco a poco van ganando terreno.
¿Cuál es la diferencia entre todos ellos? Todos realizan la misma actividad: comparten contenido en las diferentes redes sociales y dan su opinión sobre productos y marcas. La principal característica que les diferencia es su audiencia. Mientras que los grandes influencers tienen cientos de miles de seguidores o incluso llegan a millones, los microinfluencers reúnen miles y los nanoinfluencers, cientos (o puede que pocos miles en los mejores casos). Este factor provoca una serie de ventajas e inconvenientes en cada uno de ellos.
Claves del éxito en las estrategias con nanoinfluencers
A continuación, os explicamos las claves que nos pueden llevar al éxito en estrategias con nanoinfluencers.
- Son cercanos: Los nanoinfluencers son considerados por sus seguidores casi como amigos. La audiencia les conoce a la perfección. Conoce sus gustos, sus opiniones, en definitiva, su estilo de vida. Estas son las razones por las que un usuario les empieza a seguir, porque les sirven de inspiración.
- Son expertos: Los nanoinfluencers suelen ser personas expertas en un tema concreto. Fidelizan más con un nicho específico del mercado, con su pequeña audiencia. Por eso, empresas que quieren lanzar nuevos productos o servicios y pretenden introducirse en un segmento concreto de mercado deberían tenerlos en cuenta en su estrategia. Como se explica en Marketing4ecommerce, podemos encontrarnos ratios de intención de compra del 82%. Esto confirma que esta figura es mucho más creíble que la de los influencers que cada vez más se acercan a las celebrities.
- Gran interacción con el público: Los likes que obtienen, los comentarios y la cantidad de veces que se comparten sus contenidos son mucho menores que en el caso de los grandes influencers pero su influencia es mucho más notable. Las audiencias son menores y gracias a esto, más manejables, por lo que interactúan más con ellos.
- Generan mayor engagement: Con motivo de la gran interacción con sus seguidores, el ratio de engagement también aumenta. Los nanoinfluencers crean relaciones más cercanas y duraderas con sus seguidores. Es importante elegir bien el personaje que quieres para tu estrategia, que el público crea y sienta que recibe un trato especial, se sienta cercano al nanoinfluencer, que está representando a tu marca.
- Movilizan al público: No mueven grandes masas y su audiencia es mucho menor que la de un gran influencer, pero tienen una gran capacidad para movilizar al público. Esto es gracias a la fidelidad que tienen con ellos.
Más influyentes cuanto más cercanos
Actualmente, consultamos opiniones para llevar a cabo cualquier actividad de nuestro día a día: comprar productos, contratar servicios, organizar viajes, ir a comer a algún restaurante… Necesitamos referencias para todo. A la hora de buscar opiniones, confiamos más en nuestros iguales, por eso la figura del influencer fue perdiendo credibilidad y ha sido remplazada por los nanoinfluencers, la presencia de las marcas detrás de los primeros era demasiado obvia.
El estilo de vida inspirador de los nuevos nanoinfluencers, su cercanía, desparpajo y autenticidad pueden logran un gran éxito si sabemos bien cómo llevar a cabo nuestra estrategia junto a ellos.
Añadir comentario